El 2 de julio de 2020, entre las 3:30 p. m. y las 6:30 p. m., sujetos no identificados entraron a la fuerza en la vivienda de la periodista Julia Gavarrete, en San Salvador, la capital de El Salvador, y le robaron la laptop, según informaciones de prensa y declaraciones de la periodista, quien habló con el CPJ por vía telefónica.
Gavarrete, reportera del sitio noticioso independiente Gato Encerrado, declaró al CPJ que había regresado a casa cerca de las 6:30 p. m., después de cubrir una conferencia de prensa en Casa Presidencial, y había descubierto que la puerta de su habitación estaba abierta, que sus pertenencias estaban fuera de lugar, y que faltaban su laptop y varios artículos personales.
“Estaban buscando la computadora, porque no se llevaron más nada de valor. Hasta dejaron mi billetera con todas mis tarjetas y dinero en la misma mesa”, expresó Gavarrete. “Además de mis equipos de trabajo, se llevaron unas joyas de imitación y un par de zapatos. Lo encuentro muy extraño”.
La periodista señaló que creía que el robo era un intento para intimidarla como respuesta a sus trabajos críticos. Según Gavarrete, recientemente ella había informado sobre los planes de respuesta frente al coronavirus del presidente Nayib Bukele, y denuncias de manejos irregulares y corrupción.
“He trabajado en cuestiones que son incómodas para el Gobierno actual, y he presentado varias solicitudes de información pública a las que no han respondido. Siento como que es una amenaza”, la periodista declaró al CPJ.
Gavarrete expresó que agentes de la Policía habían acudido a su vivienda y habían preparado un informe en la noche del 2 de julio. La periodista también presentó una denuncia ante el Instituto de Derechos Humanos de la Universidad Centroamericana, que denunció el hecho ante la Fiscalía General de El Salvador, según versiones periodísticas.
Un representante de la Fiscalía General declaró al CPJ por correo electrónico que la información relacionada con el caso no podía divulgarse públicamente.
El CPJ envió un mensaje de texto a la Policía salvadoreña, que respondió que la información sobre el caso debía solicitarse por intermedio de la Unidad de Información Pública de la Policía. El CPJ envió un correo electrónico a esa unidad para obtener una declaración, pero no recibió respuesta.