Nueva York, 17 de abril del 2007—Un periodista mexicano quien fue secuestrado el lunes por hombres armados en Agua Prieta, una ciudad en la frontera con Arizona, ha desaparecido. El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) está investigando si el incidente tuvo relación con el trabajo del periodista.
Saúl Noé Martínez Ortega, de 36 años, quien cubre la fuente policial para el periódico Interdiario en Agua Prieta, transitaba a bordo de una Chevrolet Suburban de color negro pasada la medianoche cuando otro vehículo comenzó una persecución a alta velocidad, según la prensa local.
Martínez detuvo su vehículo a la entrada del edificio de la policía municipal y pidió ayuda, informó la prensa. Pero sujetos fuertemente armados forzaron al periodista a subir a su vehículo y se alejaron del centro de la ciudad. El periodista ha desaparecido desde entonces, afirmó al CPJ Lorenzo Martínez, padre del reportero y director del periódico.
“Estamos preocupados por nuestro colega Saúl Noé Martínez Ortega”, señaló el Director Ejecutivo del CPJ, Joel Simon. “Instamos a las autoridades mexicanas a conducir una investigación oportuna y exhaustiva, localizar a Martínez y traerlo a un lugar seguro”.
La policía estatal está investigando el secuestro, indicó José Larrinaga Talamantes, vocero de la Procuraduría General del Estado de Sonora en Hermosillo. Los investigadores encontraron 27 balas calibre 9 milímetros y 230 gramos de corte de cocaína en el vehículo del periodista, según Larrinaga. Familiares de Martínez informaron al CPJ que el periodista había comprado la sustancia para utilizar como raticida e insecticida. El vocero sostuvo que el incidente podría estar relacionado con el crimen organizado. Según Larrinaga, Martínez era muy amigo de un informante de la policía que fue secuestrado el 29 de marzo y desde entonces se encuentra desaparecido.
Según Lorenzo Martínez, el periódico familiar Interdiario, que sale tres veces por semana, cubre información general en Agua Prieta. Agregó que su hijo ha estado trabajando como periodista durante varios años, cubriendo la fuente policial durante la noche y que estaba investigando la desaparición de un amigo quien trabajaba como informante de la policía municipal. El padre cree que el secuestro de su hijo pudo estar relacionado con el trabajo periodístico sobre ese caso.
De acuerdo a las investigaciones del CPJ, otros tres periodistas mexicanos están desaparecidos. Rodolfo rincón Taracena, un reportero quien cubre crimen para el diario de Villahermosa Tabasco Hoy, ha estado desaparecido desde el 20 de enero en el estado sureño de Tabasco. Rafael Ortiz Martínez, reportero para el diario Zócalo de Monclava y conductor del noticiero matutino “Radio Zócalo” en la estación local XHCCG, despareció el 8 de julio del 2006. Había informado sobre la preponderancia de la prostitución clandestina en Monclava, infecciones de VIH y cómo se ven afectadas las familias. Alfredo Jiménez Mota, reportero especialista en temas de seguridad pública y crimen organizado del matutino El Imparcial de Hermosillo, desapareció el 2 de abril del 2005. Jiménez había informado sobre familias de narcotraficantes en el norte de México. Investigadores de Sonora han vinculado la desaparición del periodista con su trabajo periodístico. Lea más sobre estos casos y los de otros periodistas desparecidos en todo el mundo.