Nueva York, 14 de julio de 2009–La policía colombiana arrestó a un individuo quien se cree baleó al veterano periodista radial colombiano, José Everardo Aguilar, en represalia por sus reportajes sobe corrupción en el departamento sur-occidental del Cauca. El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) saluda la detención e insta a las autoridades a enjuiciar a los autores intelectuales.
El viernes, la Policía Nacional de Colombia arrestó a Arley Manquillo Rivera, alias “El Huracán”, en un puesto de control rutinario en las afueras de la capital departamental, Popayán, según un comunicado de la policía. Las autoridades creen que alguien contrató a Manquillo, quien tiene supuestos vínculos con la banda local de narcotraficantes Los Rastrojos, para asesinar a Aguilar, indicó un vocero de la policía al CPJ. La policía arrestó a Manquillo basándose en las descripciones que dieron testigos sobre el atacante, explicó el vocero.
Manquillo negó estar involucrado en el asesinato, periodistas locales señalaron al CPJ.
Aguilar era corresponsal de Radio Súper en la municipalidad de Patía, al sur del departamento de Popayán. Según fuentes policiales, los investigadores están estudiando el trabajo informativo de Aguilar sobre corrupción local y departamental como posible motivo de su muerte. El hijo del periodista, Martín, y colegas de Radio Súper señalaron al CPJ que creen que Aguilar fue asesinado en represalia por su labor.
“Saludamos la pronta investigación del asesinato de nuestro colega José Everardo Aguilar por parte de las autoridades colombianas”, declaró el Coordinador Senior del Programa de las Américas del CPJ, Carlos Lauría. “Las autoridades deben asegurarse que todos los involucrados en la muerte de Aguilar, incluyendo a los autores materiales, sean enjuiciados”.
Un individuo quien se hizo pasar por mensajero entró a la casa de Aguilar en Patía la noche del 25 de abril bajo pretexto que traía un paquete con fotos, según investigaciones del CPJ. Una vez adentro, el agresor le disparó tres veces a Aguilar, de 72 años, antes de darse a la fuga. Aguilar había trabajado para Radio Súper durante 10 años y era conocido por sus fuertes críticas sobre la corrupción y los vínculos entre políticos locales y paramilitares de ultraderecha, según entrevistas del CPJ e informes de la prensa local. Un periodista veterano, con 30 años de experiencia, Aguilar había trabajado también para las estaciones nacionales Caracol Radio y RCN, según informes en la prensa colombiana. Martín Aguilar indicó al CPJ que su padre había recibido amenazas de muerte dos años atrás pero no conocía ningún incidente reciente.
El presidente Colombiano Álvaro Uribe Vélez había anunciado una recompensa para quien tuviera información sobre el asesinato de Aguilar, informó la prensa colombiana.
En un informe reciente, Crímenes sin Castigo 2009, el CPJ encontró que el índice de muertes de periodistas había diminuido ligeramente en Colombia, históricamente uno de los países donde más periodistas han caído por su trabajo informativo. Si bien el gobierno considera que esto es producto de la política de seguridad, la investigación del CPJ demuestra que la existencia de una autocensura generalizada ha convertido a la prensa en un blanco no tan repetido.