En su edición del 6 de febrero, el semanario venezolano Quito Día publicó una entrevista extensa con Valentín Santana, líder de La Piedrita, dónde éste detallaba la posición política y las acciones pasadas del grupo progubernamental. En la entrevista, Santana amenazó con “pasar por las armas a” Granier y a Globovisión, a quienes acusa de promover la violencia en contra del presidente venezolano Hugo Chávez.
Granier hizo público un comunicado el mismo día instando a las autoridades locales a detener a Santana. Durante el fin de semana, Chávez condenó las declaraciones de Santana y describió las acciones de La Piedrita como “terroristas,” informó la prensa venezolana. Según el diario El Universal, Chávez ordenó la detención de Santana el domingo. Pero el líder de La Piedrita aún no ha sido detenido.
Valentín también se responsabilizó por varios ataques con bombas lacrimógenas durante los últimos cinco meses: contra las oficias en Caracas de Globovisión y del diario nacional El Nuevo País, contra la casa de Granier, y contra la casa de Marta Colomina, presentadora de un programa de opinión en Unión Radio y columnista del diario El Universal. Valentín indicó que La Piedrita atacó a los periodistas y medios de comunicación en represalia por su postura antichavista.
“Saludamos la condena pública del presidente Chávez en contra de este grupo y sus ataques a los medios de comunicación venezolanos”, declaró el subdirector del CPJ, Robert Mahoney. “Ahora instamos al presidente a convertir sus palabras en acciones e investigar a fondo las declaraciones escandalosas efectuadas la semana pasada por Valentín Santana, y a enjuiciar a todos los responsables por estos ataques”.
La mañana del 23 de septiembre, individuos no identificados lanzaron bombas lacrimógenas afuera de las oficinas de Globovisión en Caracas. Una bomba estalló pero nadie resultó herido. Los agresores dejaron volantes firmados por La Piedrita, señalando que harían responsable al canal de televisión–ahora objetivo militar–por cualquier cosa que pudiera sucederle a Chávez, según una trascripción publicada en el diario nacional El Nacional. El 14 de octubre, dos bombas lacrimógenas más estallaron adentro de las oficinas de El Nuevo País. Los agresores también dejaron panfletos firmados por La Piedrita declarando al director del diario, Rafael Poleo, objetivo militar, según informes en la prensa local. Nadie resultó herido en el ataque.
El 1 de diciembre, individuos no identificados lanzaron folletos similares y varias bombas lacrimógenas frente al edificio en Caracas donde reside Colomina, una periodista que critica con severidad al gobierno de Chávez, según la prensa local. Colomina indicó que los volantes la acusaban de promover el magnicidio, informó la prensa local. Según El Universal, un ataque similar ocurrió el 19 de enero frente a la casa de Granier en la capital venezolana. Granier indicó a la prensa local que su hogar también había sido atacado en diciembre. Nadie resultó herido en estos incidentes.
La tensión entre los grupos que apoyan a Chávez y quienes lo critican crece a medida que se acerca el referendo popular para que los venezolanos decidan si Chávez u otros funcionarios públicos pueden ser reelegidos indefinidamente. El referendo tendrá lugar el 15 de febrero. El 6 de octubre, el CPJ envió una carta a Chávez expresando su preocupación por la reciente ola de violencia e intimidación contra los medios venezolanos.
En mayo de 2007, RCTV, el canal privado de televisión más antiguo del país dejó de transmitir tras una decisión sin precedente del gobierno venezolano que se negó a renovarle la concesión. RCTV Internacional lanzó el 16 de julio de 2007 un servicio con canal de suscripción pago vía cable y satélite que continúa ofreciendo programación crítica.
La violencia creciente en el país también afecta a los medios venezolanos. Aunque en Venezuela, la violencia letal contra la prensa no es usual, según las investigaciones del CPJ, un periodista cayó mientras que otro fue gravemente herido. El 16 de enero, un agresor no identificado disparó contra Orel Sambrano, director del semanario local ABC de la semana y Radio América, según informes de la prensa local. Periodistas locales creen que Sambrano fue asesinado en represalia directa por su trabajo, según señalaron al CPJ. Tan solo tres días antes, individuos no identificados hirieron a balazos a Rafael Finol, coordinador político del diario El Regional cuando salía de las oficinas del periódico con varios colegas. Finol, quien se está recuperando, señaló al CPJ que cree que el ataque fue en represalia por el su trabajo informativo en apoyo al gobierno que realiza El Regional.