Homenaje al periodista Ángel Eduardo Gahona, asesinado en Managua, Nicaragua, el 26 de abril de 2018. El 27 de agosto dos hombres fueron condenados por el asesinato de Gahona en un juicio criticado por su parcialidad. (Reuters/Oswaldo Rivas)
Homenaje al periodista Ángel Eduardo Gahona, asesinado en Managua, Nicaragua, el 26 de abril de 2018. El 27 de agosto dos hombres fueron condenados por el asesinato de Gahona en un juicio criticado por su parcialidad. (Reuters/Oswaldo Rivas)

Juez nicaragüense condena a dos sujetos por el asesinato de un periodista en juicio calificado de injusto

Bogotá, Colombia, 29 de agosto de 2018–El 27 de agosto un juez nicaragüense declaró culpables a dos sujetos por la muerte del periodista Ángel Eduardo Gahona, en un juicio que la viuda del periodista, los abogados de la defensa y organizaciones de derechos humanos calificaron de viciado. El CPJ instó hoy a las autoridades a realizar una investigación y un juicio transparentes para garantizar que los asesinos de Gahona sean llevados ante la justicia.

Gahona, director del programa televisivo independiente “El Meridiano“, murió de un disparo el 21 de abril en la oriental ciudad de Bluefields mientras informaba en vivo sobre las protestas contra reformas gubernamentales al sistema del Seguro Social.

En su fallo, el Juez Sexto de Distrito Penal de Juicio, Ernesto Rodríguez, en Managua, declaró que Brandon Lovo y Glen Slate, habitantes de Bluefields que participaron en las protestas del 21 de abril, eran culpables de disparar el arma de fabricación casera que presuntamente le provocó la muerte a Gahona, según informaciones de prensa. En el juicio, el abogado defensor Maynor Curtis expresó que no se habían encontrado huellas digitales en el arma y que a los acusados no se les había encontrado restos de pólvora, según informaciones de prensa.

Migueliut Sandoval, la viuda de Gahona, declaró en entrevista telefónica desde Miami, Florida, donde ahora vive, que los dos acusados eran chivos expiatorios. Ella señaló que el juicio se había realizado en Managua, bastión del presidente Daniel Ortega, en lugar de Bluefields, y que a familiares, organizaciones de derechos humanos y medios independientes se les había prohibido ingresar al juzgado, mientras que a los medios noticiosos oficialistas se les había permitido cubrir el juicio. “Los fiscales no mostraron ninguna prueba de la culpabilidad de estos dos hombres”, Sandoval declaró al CPJ. “Fue la Policía antimotines la que lo hizo”. La Policía no respondió ni a una llamada ni a un correo electrónico del CPJ en los que se solicitaba una declaración.

“La condena de estos dos sujetos tras un juicio cerrado a observadores independientes y repleto de irregularidades no trae justicia a Ángel Eduardo Gahona”, declaró Carlos Martínez de la Serna, director de programa del CPJ, desde Nueva York. “Instamos al Gobierno de Daniel Ortega a iniciar con rapidez una investigación transparente y exhaustiva de este asesinato”.

La fiscal auxiliar Inés Miranda Mercado insistió en que “[N]o existe ni existió durante este proceso la más mínima duda de la responsabilidad de ambos acusados”, según informaciones de prensa. Lovo y Slate pudieran ser condenados a una pena de 25 años de cárcel, aunque los abogados defensores y el abogado de la familia Gahona, Boanerges Fornos, planean apelar el fallo, Sandoval declaró al CPJ.

En la red social Twitter, el independiente Centro Nicaragüense de Derechos Humanos declaró que Lovo y Slate eran inocentes y los llamó “presos políticos”, y expresó que la condena mostraba que el sistema judicial del país estaba manipulado por el Gobierno de Ortega.

Desde la muerte de Gahona en abril, las protestas se han transformado en una ola de manifestaciones nacionales contra el autoritario régimen del presidente Ortega. Más de 300 personas han muerto, principalmente a manos de la Policía y paramilitares progubernamentales, según organizaciones de derechos humanos. Las fuerzas de seguridad gubernamentales con frecuencia han golpeado a periodistas y les han disparado, según datos del CPJ.