Crackdown on the Independent Press in Cuba

Special Report Introduction
While the world’s attention was focused on the U.S.-led war against Iraq, in late March and early April, 2003, the Cuban government launched a massive crackdown on the independent press and the opposition. In all, 29 journalists were arrested, convicted, and given prison sentences ranging from 14 and 27 years.

The detentions of journalists and political dissidents, who are often accused of being “counterrevolutionaries” at the service of the United States, began on March 18 and continued for three days. Police raided and searched the journalists’ homes, confiscating books, typewriters, research materials, cameras, computers, printers, and fax machines.

At the home of Ricardo González Alfonso, who is the director of the journalists’ association Sociedad de Periodistas Manuel Márquez Sterling, police confiscated a fax machine, a printer, and a laptop computer that had been used to publish the association’s bimonthly magazine, De Cuba.

The journalists were taken to headquarters of the State Security Department (DSE)–the political police. A few days later, in early April, prosecutors requested life imprisonment for three journalists and prison terms ranging from 15 to 30 years for the rest.

The journalists’ one-day summary trials were held on April 3 and 4 behind closed doors. According to a communiqué issued by several well-known dissidents, in several cases, defense lawyers could not access their clients or only had a few hours to prepare their cases.

On April 7, courts across the island announced prison sentences for the 29 journalists, ranging from 14 to 27 years. González Alfonso and prominent journalist and poet Raúl Rivero were each sentenced to 20 years in prison. According to the prosecutor’s petition, the two journalists were accused of, among other charges, creating the journalists’ organization Sociedad de Periodistas Manuel Márquez Sterling and its “subversive” magazine, De Cuba.

Rivero and González Alfonso were tried under Article 91 of the Penal Code, which imposes lengthy prison sentences or death for those who act against “the independence or the territorial integrity of the State.” Other journalists were also prosecuted for violating Law 88 for the Protection of Cuba’s National Independence and Economy, which imposes up to 20 years in prison for anyone who commits “acts that in agreement with imperialist interests are aimed at subverting the internal order of the Nation and destroy its political, economic, and social system.”

The journalists remained imprisoned in several jails administered by the State Security Department until April 24, 2003, when most were sent to jails located hundreds of miles from their homes.

In June 2004, imprisoned journalist Carmelo Díaz Fernández was granted a medical parole but was warned that he would be sent back to prison if he recovered from his illnesses or did not maintain “good behavior.” Manuel Vázquez Portal, one of CPJ’s 2003 International Press Freedom Award winners, was released without explanation that same month. Upon his release, two state security officers suggested that Vázquez Portal leave the country. In October 2004, he was given a document indicating he had been granted a medical parole.

Rivero, Oscar Espinosa Chepe, Edel José García, and Jorge Olivera Castillo were all released on medical paroles in late November and early December 2004. During the same period, the other 23 journalists were transferred to prison hospitals in Havana, ostensibly for medical checkups. The transfers came as Cuba resumed formal diplomatic contacts with Spain in a possible precursor to normalizing relations with the European Union. The circumstances fueled speculation that additional releases were imminent, but all 23 were returned to their prisons.

As of January 2005, most of the journalists remained in prisons far from their homes, adding to heavy burden on their families.

Below are the letters and alerts that CPJ has published since March 2003 to denounce the crackdown on the independent press in Cuba. This section will be updated periodically as we learn more about the status of the imprisoned journalists. For more information, please contact CPJ’s Americas program coordinator Carlos Lauría at (212) 465-1004 x112 or via e-mail at [email protected]

{Introducción a la sección especial}

Mientras la atención del mundo se concentraba en la guerra contra Iraq liderada por Estados Unidos, a fines de marzo y comienzos de abril el gobierno cubano lanzó una ofensiva en gran escala contra la prensa independiente y la disidencia. En total, 29 periodistas fueron arrestados, condenados y sentenciados a penas de prisión de entre 14 y 27 años.

Las detenciones de periodistas y disidentes políticos, quienes a menudo son acusados de ser «contrarrevolucionarios» al servicio de Estados Unidos, comenzaron el 18 de marzo y continuaron por tres días. Agentes de la policía allanaron y registraron los hogares de los periodistas y les incautaron libros, máquinas de escribir, materiales de archivo, cámaras, computadoras, impresoras y aparatos de fax.

En la casa de Ricardo González Alfonso, director de la Sociedad de Periodistas Manuel Márquez Sterling, la policía confiscó el fax, una impresora y una computadora portátil que habían sido utilizados para publicar la revista bimensual de la organización, De Cuba.

Los periodistas fueron trasladados a las sedes del Departamento de Seguridad del Estado (DSE), la policía política. Unos pocos días después, a comienzos de abril, fiscales solicitaron cadena perpetua para tres periodistas y penas de prisión de entre 15 y 30 años para el resto.

Los juicios sumarios de los periodistas, que duraron un día, se realizaron el 3 y el 4 de abril a puerta cerrada. Según un comunicado difundido por conocidos disidentes, en varios casos los abogados de la defensa no tuvieron acceso a los defendidos o sólo tuvieron unas horas para preparar la defensa.

El 7 de abril, tribunales a lo largo de toda la isla dictaron penas de cárcel para los 29 periodistas, que oscilan entre 14 y 27 años. González Alfonso y el destacado periodista y poeta Raúl Rivero fueron sentenciados a 20 años de cárcel. De acuerdo con la petición fiscal, los dos periodistas fueron acusados de, entre otras cosas, crear la organización Sociedad de Periodistas Manuel Márquez Sterling y su «subversiva» revista, De Cuba.

Rivero y González Alfonso fueron procesados de conformidad con el Artículo 91 del Código Penal, que prevé largas sanciones de privación de libertad o muerte para todo el que actúe contra «la independencia o la integridad territorial del Estado». Otros periodistas fueron enjuiciados por violar la Ley 88 de Protección de la Independencia Nacional y la Economía de Cuba, que dispone sanciones de privación de libertad de hasta 20 años para toda persona que cometa «acciones que en concordancia con los intereses imperialistas persiguen subvertir el orden interno de la Nación y destruir su sistema político, económico y social».

Los periodistas permanecieron encarcelados en celdas del Departamento de Seguridad del Estado hasta el 24 de abril del 2003, cuando la mayoría de ellos fueron trasladados a cárceles ubicadas a cientos de kilómetros de sus hogares.

En junio del 2004, el periodista preso Carmelo Díaz Fernández recibió una licencia extrapenal por motivos de salud, pero le advirtieron que si se ponía bien de salud o no tenía una “buena conducta”, sería remitido de nuevo a la prisión. Manuel Vázquez Portal, uno de los periodistas galardonados con el Premio Internacional a la Libertad de Prensa del CPJ en el 2003, fue liberado sin explicación alguna ese mismo mes. Luego de su liberación, dos agentes de la seguridad del Estado le sugirieron que abandonara el país. En octubre del 2004, le entregaron un documento donde constaba que había recibido una licencia extrapenal por motivos de salud.

Rivero, Oscar Espinosa Chepe, Edel José García y Jorge Olivera Castillo recibieron licencias extrapenales por motivos de salud y fueron liberados a finales de noviembre y principios de diciembre del 2004. En el mismo período, las autoridades trasladaron a los demás 23 periodistas presos a hospitales penitenciarios en La Habana, con la aparente finalidad de someterlos a un chequeo médico. Los traslados se efectuaron después de que el gobierno cubano reanudara contactos diplomáticos formales con España como un paso previo a la normalización de las relaciones entre Cuba y la Unión Europea. Las circunstancias hicieron pensar a muchos que más liberaciones eran inminentes, pero los 23 periodistas fueron enviados de regreso a las prisiones de origen.

Para enero del 2005, la mayoría de los periodistas permanecían encerrados en prisiones ubicadas lejos de sus hogares, lo que significa una carga más para sus familias.

A continuación aparecen las cartas y alertas que el CPJ ha publicado desde marzo del 2003 para denunciar la ofensiva contra la prensa independiente cubana. Esta sección será actualizada periódicamente a medida que recibamos más noticias sobre el estado de los periodistas presos. Para más información, por favor comunicarse con Carlos Lauría, coordinador del programa de las Américas del CPJ, llamando al (212) 465–1004 ext. 120 o enviando un correo electrónico a la dirección [email protected]. {News Alerts – 2003-2005}

2004

CUBA: A journalist is freed as more than 20 remain jailed
POSTED December 7, 2004

CUBA: Rivero released on medical parole
POSTED November 30, 2004

CUBA: Imprisoned journalist released on medical parole
POSTED November 29, 2004
Versión en español
Versão em português

CUBA: CPJ condemns treatment of imprisoned journalists
Versión en español
Versão em português

POSTED September 2, 2004

CUBA: CPJ concerned about deteriorating health of imprisoned journalists
Versión en español
Versão em português
POSTED July 28, 2004

CUBA: Two imprisoned journalists granted medical parole
Versión en español
Versão em português
POSTED June 24, 2004

CUBA: Another imprisoned journalist starts hunger strike
Versión en español
Versão em português
POSTED May 21, 2004

CUBA: Imprisoned journalist on hunger strike
Versión en español
Versão em português

POSTED May 7, 2004

CUBA: One year later, CPJ renews call for release of journalists
Versión en español
Versão em português
POSTED April 7, 2004

CUBA: Prominent U.S. and Latin American journalists call for release of imprisoned Cuban journalists
Versión en español>>
Versão em português>>
POSTED March 16, 2004

2003

CUBA: Journalist released after six years in prison
Versión en español
Versão em português

POSTED November 18, 2003

CUBA: CPJ concerned about imprisoned journalists’ welfare
Versión en español
Versão em português

POSTED November 12, 2003

CUBA: Imprisoned journalists continue hunger strike
Versión en español
Versão em português POSTED October 29, 2003

CUBA: CPJ concerned about journalists on hunger strike
Versión en español
Versâo em português
POSTED September 3, 2003

CUBA: CPJ alarmed by deteriorating health of Cuban journalist
Versión en español
Versâo em português
POSTED August 11, 2003

CUBA: CPJ mission confirms dire situation for imprisoned journalists and their families
Versión en español
Versão em portugês
POSTED July 18, 2003

CUBA: CPJ concerned about health of imprisoned journalist
Versión en español
Versão em português
POSTED April 23, 2003

CUBA: CPJ condemns convictions of independent Cuban journalists
Versión en español
POSTED April 9, 2003

CUBA: CPJ condemns trials of independent journalists
Versión en español
POSTED April 4, 2003

CUBA: CPJ protests vicious crackdown on independent press
Versión en español
POSTED April 2, 2003

CUBA: CPJ learns of prominent journalist’s arrest
POSTED March 25, 2003

CUBA: Nine more journalists detained bringing the total to 19
POSTED March 20, 2003

CUBA: Ten journalists detained
Versión en español
POSTED March 19, 2003

CUBA: Argentine professor detained for interviewing independent journalists
Versión en español
POSTED February 14, 2003