El periodista José Rubén Zamora, fundador y presidente del periódico elPeriódico, llega a una audiencia judicial el 3 de agosto de 2022, días después de su detención por las autoridades guatemaltecas por acusaciones de lavado de dinero y chantaje, en Ciudad de Guatemala, Guatemala. (Reuters/Luis Echeverria)

‘Perseguir a toda voz crítica’: el hijo del periodista guatemalteco encarcelado José Rubén Zamora habla sobre la detención de su padre

Por Dánae Vílchez

Cuando la Policía de Guatemala arrestó a José Rubén Zamora en julio de 2022, la detención constituyó el último ataque en una campaña de acoso que data de varias décadas contra el emprendedor periodista investigativo guatemalteco, quien en 1995 recibió el Premio Internacional de la Libertad de Prensa del CPJ.

Zamora, quien fundó elPeriódico en 1996 y sigue ejerciendo de presidente de la publicación, fue arrestado el 29 de julio y continúa en prisión preventiva en la cárcel de Mariscal Zavala en Ciudad de Guatemala, mientras los fiscales llevan adelante una investigación penal por los delitos de lavado de dinero, chantaje y tráfico de influencias. 

Zamora, su familia y sus compañeros han denunciado que el proceso judicial es una represalia por la cobertura informativa de elPeriódico sobre presuntos actos de corrupción que implican al presidente guatemalteco Alejandro Giammattei y a la fiscal general Consuelo Porras. 

El hijo de Zamora, José Zamora, quien también es periodista y actualmente se desempeña en Exile Content Studio, una empresa de medios y entretenimiento en idioma español con sede en Miami, habló con el CPJ en una entrevista grabada en video sobre el caso de su padre y el estado actual de la libertad de prensa y la democracia en Guatemala. 

Se editó la entrevista para hacerla más concisa y fácil de entender. 

En respuesta a la solicitud de comentarios del CPJ, Juan Luis Pantaleón, portavoz de la fiscalía guatemalteca, dijo en un correo electrónico que el caso contra Zamora “no se trata de ninguna persecución política ni de ningún ataque” a la libertad de expresión. El CPJ envió un correo electrónico a la oficina del secretario ejecutivo de la presidencia pero no recibió respuesta.

El periodista José Zamora, cuyo padre, José Rubén Zamora, está detenido en Guatemala. (Foto: José Zamora)

No es nuevo que los gobiernos de turno de Guatemala ataquen a tu papá. ¿Nos podrías hablar del historial de ataques contra él?

José Zamora: Mi papá tiene una carrera de más de 30 años en periodismo y fue  el primer periodista que empezó a hacer periodismo investigativo con su equipo en Guatemala. Esto ha llevado a una serie de ataques y y hostigamiento y persecución durante todos esos años: campañas de difamación por parte del Estado, terrorismo fiscal y muchos otros. 

Por ejemplo, dijeron que elPeriódico no había pagado impuestos durante años. Vinieron a auditar el periódico pero no encontraron nada.

Luego estaban las demandas. En un momento dado, hubo 195 demandas espurias contra mi padre y el medio, algunas de ellas incluso haciendo un uso indebido de leyes importantes, como la ley contra el feminicidio, que está destinada a proteger a las mujeres que sufren abusos por parte de sus parejas. Hubo varias servidoras públicas que lo demandaron utilizando esa esa ley, que es totalmente una aberración. 

Y luego está el boicot comercial. El gobierno y el presidente han amenazado a influyentes empresarios y básicamente les han prohibido anunciarse en elPeriódico. 

Mi padre también ha sido objeto de amenazas, secuestros y atentados. En 2003, hubo un secuestro. Entraron en la casa de mis padres -mis hermanos y yo aún vivíamos con ellos en ese momento- y nos mantuvieron como rehenes durante unas tres horas. 

En 2008, volvieron a intentar asesinar a mi padre. Lo secuestraron al salir de un restaurante, se lo llevaron, lo golpearon, le inyectaron algo para matarlo y lo fueron a tirar. Por suerte ese lugar era tan frío que le dio hipotermia. Y la hipotermia fue, al final, lo que le salvó. Los bomberos lo trajeron pensando que era un cadáver y, cuando empezaron a preparar la autopsia, se dieron cuenta de que tenía signos vitales [y lo trataron]. 

Pero este encarcelamiento es totalmente nuevo. Llevaban un año intentándolo, pero no se había concretado hasta ahora. Varias veces, diferentes fuentes nos advirtieron de que estaban fabricando casos contra él. 

¿Cómo está tu padre?

Está en una celda aislada y, en general, goza de buena salud y buen ánimo. Quiere luchar y seguir haciendo periodismo incluso estando allí. En algún momento tuvo algunos problemas de salud: su celda estaba llena de chinches, que le picaron y le provocaron una reacción alérgica. Pero ahora, en general, goza de buena salud y está mucho mejor.

¿Qué estaba publicando elPeriódico antes de esta escalada de criminalización? 

El Presidente Giammatei lleva 130 semanas en el poder y elPeriódico ha publicado 130 investigaciones, más o menos. Entonces no ha habido una semana donde no se denuncie algún acto de corrupción de su administración.

En el país en general, Giammattei ha tenido un ataque sistemático en contra de la democracia. El más reciente de estos ataques sistemáticos en contra de la democracia es esta persecución a la prensa. En el caso de elPeriódico y mi papá, todos se puso peor en Noviembre, cuando elPeriódico publicó una investigación titulada “La trama rusa” que denunciaba como hizo un negocio el presidente con una empresa rusa a la que el Estado de Guatemala le otorgó una concesión para explotar una mina y que ahí le pagaron al presidente. Eso fue como el punto de quiebre. 

¿Puedes contarnos más sobre el caso de su padre? ¿De qué se le acusa?

En Guatemala, los procesos judiciales suelen durar años en términos de investigación y procesos. Pero [el caso legal contra Zamora] se armó en 72 horas. Se basó en la denuncia de un “denunciante” [un hombre al que Zamora pidió ayuda, pero que luego delató al periodista].

Mi padre está acusado de lavado de dinero y chantaje. Lo que ocurrió es que un empresario serio le dio a mi padre 300.000 quetzales (38.050 dólares) como apoyo al periódico. Mi padre se puso en contacto con el [hombre que se convirtió en el] “denunciante” [para que ingresara el dinero en la cuenta bancaria de su negocio] y le diera un cheque de su empresa. Mi padre quería que ese cheque se depositara en la cuenta de Aldea Global, la empresa propietaria de elPeriódico. Pero cuando mi padre va a depositar el cheque, el cheque es de una cuenta que está inactiva y no lo pueden depositar. 

[Nota del editor: Según una entrevista con el abogado de Zamora en el medio de comunicación online centroamericano El Faro, la razón por la que Zamora no depositó la donación directamente en la cuenta de Aldea Global, sino que pidió al hombre que se convirtió en el “denunciante” que le hiciera un cheque desde su cuenta, fue porque esta triangulación le ayudaría a proteger la identidad del donante].

[En cuanto al] chantaje, el Ministerio Público dijo que el denunciante creía que los fondos de mi padre que vienen del que él chantajeó a alguien para que se lo dieran, pero no hay pruebas. 

¿Podrías decirnos por qué tu padre pasa 90 días en prisión preventiva? 

El juez le dio al Ministerio Público el plazo máximo para hacer la investigación que son tres meses y dicta prisión preventiva a mi papá. La verdad es que mi papá cumple con todos los requisitos para que le dieran medidas sustitutivas y pudiera estar con arresto domiciliario. Pero lo quieren tener ahí preso, una de las cosas que querían hacer es como humillarlo y hacerle un linchamiento público. Incluso cuando lo llevaban en las audiencias todo era como excesivo. Como que llevaran allí a uno de los más grandes capos del crimen organizado. 

Todo ha sido muy público y es un ejemplo de una serie de ataques sistemáticos en contra de la democracia y en contra de la prensa. Mi papá es un ejemplo, pero el mensaje es para todos y es mucho más grande. Y ese es que van a perseguir a toda voz crítica. 

¿Cuál es el clima con el que están trabajando en este momento los periodistas de elPeriódico? 

Todos creen profundamente en el trabajo que hacen, en lo importante que es para la democracia y en lo importante que es para hacer un mejor país. Entonces todos siguen haciendo su trabajo, pero es muy complicado cuando se va el líder de la redacción por un lado. Por otro lado está el tema financiero. Por casi 15 días congelaron las cuentas. Por casi tres semanas los periodistas no pudieron recibir su salario. Y eso te demuestra mucho, no solo la fuerza y determinación y la convicción de los periodistas, porque de verdad siguieron haciendo su trabajo en una situación bastante tensa, pero además sin tener ingresos. Eso poco a poco se ha ido resolviendo. Pero es muy complicado. 

¿Qué crees que necesitan los periodistas de Guatemala para hacer su trabajo de manera libre? 

Pues lo que necesitan es libertad. Un estado decente debería ver a la prensa como un aliado. La verdad  es imposible que sepan todo lo que pasa en todas las instituciones del Estado. O sea, deben intentarlo y deben ser transparentes. Pero la verdad es que el Estado es muy grande. Entonces el Estado debería de apoyar y tener una relación decente con la prensa y permitirles que hagan su trabajo, porque incluso les permitiría parar actos de corrupción. 

¿Cuáles son las peticiones que ustedes tienen ahorita para el caso de tu papá? 

Yo creo que la petición principal es que lo dejen en libertad. El caso no existe, los indicios que se crearon generaron son sumamente débiles, no han logrado probar absolutamente nada. 

Segundo punto: Si lo van a tener detenido, deberían otorgarle medidas sustitutivas y debería poder ir a esperar que se haga el proceso en arresto domiciliario. 

Y tercero, que no persigan a elPeriódico como empresa. Durante este proceso han perseguido al periódico como empresa y de esa forma han también atacado no solo a la libertad de prensa en general, sino que han atacado a todos los periodistas y a todas las personas que trabajan en elPeriódico. Persiguieron también a la directora financiera, Flora Silva y la llevaron a prisión. Es otra persona que lo mínimo debería ser que debería estar también con medidas sustitutivas y en prisión en arresto domiciliario.