Ciudad de México, 9 de marzo de 2022 – Las autoridades mexicanas deben investigar inmediata y exhaustivamente el homicidio del periodista Juan Carlos Muñiz y esclarecer si lo mataron por su actividad periodística, declaró este miércoles el Comité para la Protección de Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés).
El 4 de marzo, el cadáver de Muñiz fue hallado en Los Olivos, un vecindario de la ciudad de Fresnillo, en el central estado de Zacatecas, según informaciones de prensa.
Su cadáver se encontraba en un taxi y presentaba heridas de bala. Además de trabajar como reportero del medio digital local Testigo Minero y otros medios locales, Muñiz se ganaba la vida como taxista, de acuerdo con las informaciones citadas.
En un comunicado, la Fiscalía General de Justicia de Zacatecas declaró que había abierto una investigación sobre el homicidio y que implementaba protocolos especiales utilizados en casos de ataques contra la libertad de expresión. El comunicado no brindaba más información sobre el móvil del homicidio ni los sospechosos.
Como mínimo, otros cinco periodistas han sido asesinados en México desde el 1 de enero, según datos e investigaciones del CPJ. La organización sigue investigando para confirmar si esos homicidios estuvieron relacionados con el ejercicio del periodismo.
“En México continúan muriendo periodistas en 2022 y el brutal asesinato de Juan Carlos Muñiz es un claro ejemplo del extremo riesgo que los reporteros locales que dan cobertura a la política y el crimen organizado enfrentan a diario”, declaró Jan-Albert Hootsen, representante del CPJ en México. “La inacción del Gobierno mexicano permite que la impunidad que alimenta estos homicidios se agudice y consolide la condición de México como el país más violento del hemisferio occidental para el ejercicio del periodismo”.
El CPJ llamó repetidas veces a la Fiscalía General de Justicia de Zacatecas, pero nadie contestó las llamadas.
Muñiz era colaborador de Testigo Minero, un medio digital que da cobertura a las noticias de la zona de Fresnillo, y utilizaba los seudónimos “Rigoberto” y “El TX”, según dos comunicados del medio, que expresó que el segundo seudónimo era una alusión a su trabajo como taxista.
Entre los artículos más recientes de Testigo Minero, se encuentran algunos sobre temas políticos y otros sobre nota roja y crimen organizado en Fresnillo, según el análisis del CPJ sobre el contenido del medio digital. Muchos de los artículos se publican con la firma de “Testigo Minero”, y el CPJ no logró encontrar de inmediato artículos recientes atribuibles a Muñiz ni en el portal de noticias ni en la página de Facebook de Testigo Minero. El CPJ llamó a Testigo Minero para obtener una declaración, pero nadie respondió la llamada.En sus comunicados, Testigo Minero expresó que Muñiz también se desempeñaba como bombero voluntario y que colaboraba con otros medios de prensa de la región, pero no indicó el nombre de tales medios. Tampoco mencionó si el periodista había recibido alguna amenaza por su trabajo periodístico.