Ciudad de México, 12 de mayo de 2016 – El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) expresa su alarma por el creciente acoso de que es objeto el diario mexicano Vanguardia y su plantel. En las últimas semanas, el sitio web de Vanguardia fue atacado, la policía allanó el rancho del propietario, un ex funcionario local demandó al periódico y sujetos desconocidos siguieron a uno de sus periodistas hasta la casa, según Vanguardia, el periódico más antiguo y de mayor circulación de Saltillo, capital del norteño estado de Coahuila.
“Instamos a las autoridades mexicanas a investigar a fondo la declaración de Vanguardia de que existe una campaña dirigida a intimidar al periódico y sus periodistas”, expresó Carlos Lauría, coordinador sénior del programa de las Américas del CPJ, desde Nueva York. “Las autoridades deben garantizar que Vanguardia pueda continuar informando sobre cuestiones sensibles sin temor a represalias”.
En un editorial publicado el 5 de mayo, el diario denunció una campaña para hostigar al periódico. Vanguardia sostuvo que sujetos desconocidos habían seguido a uno de sus periodistas, cuyo nombre al principio no fue divulgado. Varios días después el periódico identificó a la periodista como Roxana Romero, quien refirió al CPJ que dos individuos la habían seguido en un auto cuando ella regresaba a la casa procedente del trabajo la noche del 4 de mayo. Cuando ella llegó a su casa, los individuos pararon en una esquina cercana y se alejaron, sólo para pasar por su casa poco después. Según Vanguardia, los mismos sujetos habían sido vistos cerca de la sede editorial el día anterior.
El periódico le otorgó a la periodista una licencia temporal y un equipo de seguridad en su vivienda para su protección. Romero declaró al CPJ que en estos momentos está evaluando cuándo o si sería seguro para ella reincorporarse al trabajo.
En su editorial, el periódico expresó que sus periodistas eran blanco de ataques que buscaban desprestigiarlos, procedentes de varios sitios web de Coahuila que al parecer han sido creados con el único fin de desacreditar a los periodistas. El diario también denunció que en abril ocurrió un intento de derribar su sitio web mediante un ataque de denegación de servicios distribuido (Distributed Denial of Service, DDoS) –en el cual múltiples computadoras tratan de sobrecargar el servidor que aloja el sitio web mediante rápidas solicitudes para desplegar el sitio– que de acuerdo con el periódico se originó en los estados de Coahuila, Puebla y Nuevo León. El equipo tecnológico de Vanguardia bloqueó el ataque DDoS, precisó el periódico.
El viernes, los abogados del exgobernador de Coahuila, Humberto Moreira, anunciaron que éste había interpuesto una querella tanto contra Romero como contra el periódico por haber sufrido “daños morales” en relación con un artículo publicado el 18 de febrero de 2016 en el cual Romero afirmaba que el gobierno inapropiadamente le había otorgado una pensión a Moreira en diciembre de 2015.
El propio Moreira no ha hablado públicamente de la querella. El CPJ se comunicó con sus abogados para transmitir una solicitud de declaración, pero no ha recibido respuesta del ex gobernador.
Moreira continúa siendo una figura poderosa en la política de Coahuila. Por poco tiempo ejerció de presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), al cual pertenece el mandatario mexicano Enrique Peña Nieto. El hermano, Rubén Moreira, ejerce de actual gobernador de Coahuila.
El mismo viernes, aproximadamente 30 efectivos de un equipo élite de la policía estatal allanó el rancho del propietario de Vanguardia, Armando Castilla Galindo, según versiones periodísticas. El allanamiento, que fue autorizado por orden judicial, tenía como propósito desalojar a Castilla por una deuda hipotecaria no pagada de 2009, según las versiones periodísticas. Vanguardia expresó que el allanamiento fue realizado con una fuerza sin precedentes en una demanda civil, e incluyó el empleo de maquinaria pesada.
El gobierno de Coahuila sostuvo en una declaración que la policía había actuado en pleno cumplimiento de la ley.
Vanguardia ha sido objeto de ataques con anterioridad. En 2011, lanzaron una granada contra su sede editorial en Saltillo. En 2013, el fotógrafo de Vanguardia Daniel Martínez Balzaldúa fue asesinado en Saltillo. Ningún hecho trajo como consecuencia arrestos ni condenas. En los últimos años, Coahuila ha sido escenario de violentas guerras territoriales entre grupos de la delincuencia organizada.
México es uno de los países más peligrosos del mundo para ejercer el periodismo, según datos del CPJ. Los periodistas con frecuencia hacen frente a amenazas de violencia procedentes de las autoridades o de miembros de grupos criminales, según datos del CPJ. Desde 1992, por lo menos 36 periodistas han sido asesinados por su labor informativa, mientras decenas de otros han muerto en circunstancias no esclarecidas.