21 de septiembre de 1999
Su Excelencia Andrés Pastrana Arango
Presidente de la República de Colombia
Casa de Nariño
Santa Fe de Bogotá, Colombia
Your Excellency,
El Comité para Proteger a los Periodistas (CPJ) le escribe para condenar el asesinato el 16 de septiembre de Guzmán Quintero Torres, jefe de redacción del diario El Pilón de Valledupar, capital del departamento norteño de Cesar. Le exhortamos a garantizar que los responsables de este horrible crimen serán llevados a justicia.
A eso de las 10 de la noche del 16 de septiembre, Quintero se hallaba sentado en el Hotel y Restaurante Los Cardones, donde solía parar en su camino a casa desde su oficina. Un hombre armado se le acerc&ooacute;, le disparó varias veces en la cabeza y el pecho y huyó en una motocicleta conducida por un cómplice. Dos colegas, un fotógrafo y un reportero de El Pilón que acompañaban esa noche a Quintero, fueron testigos del suceso. La policía tiene una descripción del asesino.
Quintero era respetado en el gremio periodístico y había fundado el Círculo de Periodistas de Valledupar. Era también corresponsal de Televista, un programa noticioso del canal local Telecaribe, y profesor de la Universidad Nacional Abierta y a Distancia. Antes había trabajado como director de Radio Caracol en Valledupar, corresponsal en la zona atlántica del noticiero del canal NTC, y reportero del diario de Barranquilla El Heraldo.
El motivo del asesinato de Quintero, quien tenía 35 años y deja a su esposa y dos niños, aún se ignora. De acuerdo a sus colegas, Quintero no había recibido amenazas de muerte recientemente, aunque hace unos años recibió amenazas por publicar una nota en El Heraldo sobre las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), un grupo paramilitar de ultraderecha que combate a guerrilleros izquierdistas.
Quintero permaneció de bajo perfil por unos meses tras recibir las amenazas y cuando regresó al periodismo lo hizo casi exclusivamente en el área de finanzas y al parecer dejó de cubrir noticias políticas de contenido sensible.
Sin embargo, Quintero estaba investigando el asesinato el 11 de agosto de 1998 de la periodista televisiva de Valledupar Amparo Leonor Jiménez Pallares, quien según las autoridades fue abatida por transmitir un reportaje en 1996 sobre la matanza por parte de paramilitares de unos campesinos que hab’an ocupado una hacienda propiedad de un funcionario del gobienro. Jiménez, al igual que Quintero, fue muerta por un hombre armado que huyó en una motocicleta conducida por un cómplice. El hombre armado fue capturado, pero han habido pocos avances en llevar a justicia al autor intelectual del crimen.
El asesinato de Quintero ocurre sólo cinco semanas después del asesinato el 13 de agosto del humorista popular Jaime Garzón en Bogotá. Fuentes locales han dicho al CPJ que otros cuatro periodistas de Valledupar se encuentran amenazados e intentan salir del país debido a temores por su seguridad.
El CPJ está profundamente preocupado por la incesante violencia cometida contra periodistas colombianos. Debido a la intensificación de la guerra civil, es imperativo que los colombianos puedan recibir noticias objetivas de lo que ocurre en su pa’s. El CPJ cree que una prensa libre podría desempeñar un rol importante en el proceso de paz colombiano. Le exhortamos, por lo tanto, a velar porque los periodistas colombianos puedan cumplir sus responsabilidades profesionales sin temor a represalias violentas.
En particular, le exhortamos a garantizar que las autoridades emprendan investigaciones exhaustivas en torno a los asesinatos de Quintero y sus colegas. Le agradeceriamos enviarnos cualquier informaci–n que surja como producto de las investigaciones.
Atentamente,
Ann K. Cooper
Executive Director
Join CPJ in Ayude al CPJ a denunciar ataques contra la libertad de prensa en Colombia
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Su Excelencia Andrés Pastrana Arango
Presidente de la República de Colombia
Casa de Nariño
Santa Fe de Bogotá, Colombia