Nueva York, 16 de diciembre de 2014–El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) condena el asesinato del propietario de un canal de televisión y presentador de noticias Reynaldo Paz Mayes, quien fue asesinado a balazos el lunes en Honduras, y exhorta a las autoridades a investigar el crimen de forma exhaustiva y enjuiciar a los responsables.
Paz, de 48 años, estaba hacienda ejercicio el lunes por la mañana en un parque deportivo en la ciudad de Comayagua en región central de Honduras cuando atacantes no identificados le dispararon dos veces por la espalda, según informes de prensa. Paz era propietario y fundador de un pequeño canal de televisión, RPM TV Canal 28, donde también presentaba un noticiero diario y uno semanal, según informes de prensa.
“Honduras tiene una tendencia alarmante de permitir que los asesinatos de periodistas permanezcan sin resolverse y sin esclarecerse, perpetuando el ciclo de impunidad”, afirmó Carlos Lauría, coordinador senior del programa de las Américas del CPJ. “Las autoridades hondureñas deben conducir una investigación exhaustiva e inmediata sobre el asesinato de Reynaldo Paz Mayes, examinar a fondo todos los motivos posibles y enjuiciar a los responsables”.
Periodistas locales señalaron al CPJ el martes que a pesar de que no tenía experiencia en periodismo, Paz había fundado el canal de televisión hacía dos años y utilizaba sus programas para apoyar a LIBRE, partido político de la oposición, y para criticar el golpe de estado de 2009 contra el ex presidente Manuel Zelaya. Además de noticias, el canal también tiene programas de deportes, música y entretenimiento, según su página en Facebook.
Juan Ramón Flores, propietario del canal de televisión CTV Canal 48 y presidente de LIBRE en la ciudad de Comayagua, afirmó al CPJ que Paz había recibido amenazas durante años vinculadas a su afiliación política y, más recientemente, en relación a su críticas al aire contra el Presidente Juan Orlando Hernández, a quien acusó de influencia indebida en todos los poderes del Estado. Flores señaló que la amenaza más reciente había sido en una llamada anónima una semana antes del ataque. Paz mencionó las amenazas durante su programa, afirmó Flores.
Dos periodistas de Comayagua, quienes solicitaron permanecer en el anonimato por temor a represalias, indicaron que varios medios critican al gobierno. Los periodistas afirmaron al CPJ que no estaban seguros de que el asesinato fuera en relación con las opiniones de Paz en su noticiero.
Un informe especial publicado por el CPJ en septiembre halló que en un contexto de violencia generalizada e inestabilidad provocado por el crimen organizado y la corrupción, Honduras ha experimentado un incremento alarmante en el nivel de violencia contra la prensa que permanece en la impunidad.