Ciudad de México, 13 de mayo de 2022 – Las autoridades mexicanas deben investigar con prontitud, seriedad y transparencia el asesinato de las periodistas Yessenia Mollinedo Falconi y Sheila Johana García Olivera, declaró este viernes el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés).
Las periodistas entraban a su auto en el estacionamiento de una tienda de autoservicio en Cosoleacaque, una localidad del oriental estado de Veracruz, cuando un número no precisado de atacantes se les acercaron y les dispararon cerca de las 4 p. m. del lunes 9 de mayo, según informaciones de prensa que citaban declaraciones de testigos presenciales.
Mollinedo era la fundadora y directora de El Veraz, un medio digital que da cobertura noticiosa a la actualidad del sur de Veracruz. García había sido contratada recientemente como camarógrafa para el portal de noticias, según las citadas versiones de prensa. La Fiscalía General del Estado de Veracruz publicó un comunicado en Facebook, en el cual confirmó que había abierto una investigación.
México es el país más violento del hemisferio occidental para el ejercicio del periodismo, según datos del CPJ. En lo que va de 2022, como mínimo tres periodistas han sido asesinados en represalia por su trabajo, y el CPJ investiga otros cinco casos de asesinato. El asesinato de Mollinedo y García tuvo lugar a menos de una semana de la fecha en que se halló el cuerpo sin vida del periodista Luis Enrique Ramírez en el norteño estado de Sinaloa.
“Si bien el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador ha afirmado muchas veces que no habría impunidad en los crímenes contra periodistas, el indignante asesinato de Yessenia Mollinedo y Johana García resalta la incapacidad de su Gobierno para prevenir la violencia contra la prensa mexicana”, declaró Jan-Albert Hootsen, representante del CPJ en México. “La impunidad estimula estos crímenes. Solamente si las autoridades mexicanas realizan una investigación exhaustiva y transparente del asesinato de Mollinedo y García y garantizan que sus asesinos rindan cuentas ante la Justicia, es que pueden probar sus palabras con hechos”.
Mollinedo había cubierto la inseguridad y la delincuencia en la región para El Veraz, pero dejó de hacerlo luego de recibir numerosas amenazas de muerte en los últimos años, según el hermano de la periodista, Ramiro Mollinedo Falconi, quien conversó con el CPJ por videollamada. La mayoría de sus artículos se habían retirado del portal para proteger su vida.
El 30 de abril, Mollinedo recibió amenazas de muerte cuando daba cobertura a actividades en Cosoleacaque durante el Día del Niño, un feriado nacional en México. Dos sujetos que viajaban en una motocicleta “se le acercaron y le dijeron que sabían quién era ella”, declaró Ramiro Mollinedo. Ese mismo día, Mollinedo le dijo a su hermano que dos hombres en un taxi la habían seguido. La periodista describió a los hombres como de gran tamaño y señaló que la habían mirado fijamente de una manera que ella consideró amenazadora.
García recibió capacitación por parte de Mollinedo y se le había entregado una credencial de prensa el 4 de mayo, agregó el hermano. El CPJ no logró confirmar ninguna otra información sobre García ni sobre la trayectoria periodística que tuvo antes de incorporarse a El Veraz.
El año pasado, sujetos desconocidos habían disparado contra la vivienda de García, Ramiro Mollinedo declaró al CPJ, y añadió que no tenía más detalles sobre ese hecho. El CPJ no logró confirmar ni este ataque ni la existencia de amenazas contra García.
El Veraz fue fundado en 2015 y empleaba, como mínimo, a otros nueve reporteros y editores al momento de la muerte de Mollinedo, expresó Ramiro Mollinedo, y dijo que el sitio web del medio digital estaba desactivado debido a las dificultades financieras.
La página de Facebook del medio digital tiene 20.000 seguidores y hace poco publicó artículos sobreactividades y conferencias de prensa ofrecidas por funcionarios públicos de la zona de Minatitlán, así como artículos sobre protestas contra presuntos abusos de poder por parte de las autoridades locales. La mayoría de los artículos recientes no llevaban firma, y ninguno de los artículos publicados en los últimos tres meses llevaba la firma de Mollinedo.
La Comisión Estatal de Atención y Protección de Periodistas (CEAPP), una institución autónoma del estado de Veracruz, no envió una respuesta de inmediato a una solicitud que se le envió por aplicación de mensajería para que ofreciera una declaración. El CPJ realizó varias llamadas a la oficina de la fiscal general de Veracruz, Verónica Hernández, pero no recibió respuesta.