Las condiciones para el ejercicio del periodismo son esencialmente precarias, justo cuando el coronavirus se propaga
Nueva York, 27 de marzo de 2020 —El presidente guatemalteco Alejandro Giammattei tiene la oportunidad de revertir el largo historial de obstrucción, acoso judicial, ataques organizados en las redes sociales y amenazas de violencia contra la prensa, pero hará falta su firme compromiso para superar los fracasos de los Gobiernos anteriores, concluyó el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) en un informe que divulga hoy.
El informe, “Déficit de confianza: el nuevo presidente guatemalteco debe superar el escepticismo con el fin de mejorar las condiciones para el ejercicio de la libertad de prensa”, halló que las condiciones para ejercer el periodismo son esencialmente precarias, justo cuando el país enfrenta la pandemia provocada por el coronavirus y necesita información precisa. Las disposiciones legales sobre los delitos informáticos son inadecuadas para contrarrestar las campañas organizadas de acoso en las redes sociales, y los funcionarios frecuentemente abusan de las leyes, con el objetivo de silenciar el periodismo crítico. El informe examina cómo los periodistas rurales e indígenas son particularmente vulnerables a la discriminación y a las amenazas de grupos criminales y funcionarios corruptos. Los periodistas que cubren el tema del medio ambiente son objeto de represalias con frecuencia.
“Durante casi una década, el Gobierno de Guatemala no ha logrado proteger realmente a los periodistas, y en el actual ambiente polarizado es crucial que el Gobierno otorgue prioridad a la libertad de prensa”, declaró Natalie Southwick, coordinadora del programa de Centroamérica y Sudamérica del CPJ. “Tras muchos años de maltrato y violencia, los periodistas guatemaltecos recelan de que el Gobierno realmente intente defenderlos, un problema que el presidente Giammattei debe abordar con urgencia si espera recuperar la confianza de los periodistas y combatir la corrupción endémica en Guatemala”, expresó Southwick, quien elaboró el informe con la colaboración de Dánae Vílchez, corresponsal del CPJ para Centroamérica.
La impunidad por el asesinato de periodistas es casi absoluta. Desde 1992, el CPJ ha documentado seis casos de periodistas asesinados en Guatemala, cuatro de ellos directamente en represalia por su labor periodística. El CPJ investiga el motivo de otros 19 casos de asesinato de periodistas guatemaltecos, entre ellos el reciente asesinato del periodista Bryan Guerra.
El expresidente Jimmy Morales tuvo una actitud hostil contra todo el que lo investigaba, y desacreditaba y socavaba a los periodistas. Por su parte, Giammattei ha tomado medidas para distanciarse de su antecesor, y ha ampliado el acceso a las conferencias de prensa y a altos funcionarios. Asimismo, el Gobierno ha reafirmado su apoyo a la Fiscalía de Delitos contra Periodistas, una unidad investigativa.
El informe contiene recomendaciones para Giammattei, el Fiscal General y el Congreso sobre la adopción de medidas legislativas, el cumplimiento de los compromisos internacionales y el mejoramiento del acceso de los medios. Otras recomendaciones están dirigidas a la Organización de los Estados Americanos, las Naciones Unidas, los medios de comunicación, y Facebook y Twitter para proteger mejor a los periodistas de las campañas de acoso selectivas.
El sitio web del CPJ contiene recursos, avisos de seguridad y kits de seguridad para periodistas que soliciten asistencia y asesoría.
Nota a los editores:
“Déficit de confianza: el nuevo presidente guatemalteco debe vencer el escepticismo con el fin de mejorar las condiciones para el ejercicio de la libertad de prensa” se puede consultar en el sitio web del CPJ en inglés y español. Si tiene preguntas o desea coordinar una entrevista con un experto del CPJ, escriba a la dirección press@cpj.org.