De muchas maneras, los peligros que enfrentan los periodistas se han mantenido inalterables durante varias décadas. Algunos de los ataques más amplios e indiscriminados contra la prensa sucedieron en 2011, durante las revueltas en demanda de reformas democráticas. Funcionarios de gobierno y militantes del partido gobernante en Egipto atacaron a más periodistas del modo más alevoso en el período de tiempo más corto que jamás se haya registrado. Periodistas de diversas nacionalidades trabajando para medios que atendían públicos en todos los idiomas más importantes fueron atacados o detenidos. La amplia gama de violencia y restricciones acentuaron el rol valiosísimo que tienen los periodistas para hacer que gobiernos y otros actores asuman las responsabilidades que les competen.
Manual de Seguridad para Periodistas del CPJ
C Conclusión: El Mundo por Delante
De muchas maneras, los peligros que enfrentan los periodistas se han mantenido inalterables durante varias décadas. Algunos de los ataques más amplios e indiscriminados contra la prensa sucedieron en 2011, durante las revueltas en demanda de reformas democráticas. Funcionarios de gobierno y militantes del partido gobernante en Egipto atacaron a más periodistas del modo más alevoso en el período de tiempo más corto que jamás se haya registrado. Periodistas de diversas nacionalidades trabajando para medios que atendían públicos en todos los idiomas más importantes fueron atacados o detenidos. La amplia gama de violencia y restricciones acentuaron el rol valiosísimo que tienen los periodistas para hacer que gobiernos y otros actores asuman las responsabilidades que les competen.
Sin embargo, la tecnología está alterando en forma sumamente veloz el modo en que las noticias se difunden. La divulgación de correspondencia diplomática confidencial de Estados Unidos por la red WikiLeaks, ocurrida entre 2010 y 2011, puso de relieve la revolución global en el flujo informativo. Los gobiernos y sus aliados están moviéndose de modo agresivo para contener este fenómeno, según revela la investigación del CPJ. Cerca de la mitad de los periodistas encarcelados en todo el mundo fueron detenidos por acusaciones de actuar en contra de los intereses del Estado por cargos de espionaje y de violaciones a secretos de Estado. Y aquellos en riesgo reflejan la naturaleza cambiante del negocio de la información: cerca de la mitad de los periodistas en prisión trabajan básicamente en línea, y cerca de la mitad son freelancers. Cada año, esas proporciones se vuelven más grandes.
Nuevas redes de medios digitales están en pleno auge. Algunas establecidas sobre la base de formatos tradicionales, mientras que otras reúnen a los periodistas en una comunidad de reporteros independientes. Los periodistas de esta última categoría a menudo trabajan sin apoyo institucional, incluyendo seguros y respaldo legal, del que gozaron muchos reporteros de medios tradicionales durante años. En este clima cambiante y peligroso, es preciso orientarse por algunos principios básicos: esté plenamente informado sobre cuestiones de seguridad, piense su seguridad como una consideración primaria, prepárese acabado para cada tarea, busque a otros periodistas en el terreno y cuídense antes, durante y después de sus coberturas periodísticas.