Nueva York, 27 de marzo del 2007—El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) está alarmado por amenazas de muerte contra el periodista colombiano Germán Hernández, quien se vio obligado abandonar su casa, y por un supuesto complot para asesinar al periodista Darío Arizmendi, quien huyo del país este mes.
“Estamos muy preocupados por las amenazas de muerte contra nuestro colega Germán Hernández, al igual que por la aparente conspiración para asesinar a Darío Arizmendi”, señaló el Director Ejecutivo del CPJ, Joel Simon. “Instamos a las autoridades colombianas a investigar rigurosamente ambos casos, a proporcionar la protección necesaria para que los dos periodistas puedan continuar con su trabajo, y a enjuiciar a todos los responsables”.
Hernández, jefe de redacción de El Diario del Huila, indicó al CPJ que abandonó la ciudad de Neiva, ubicada a 236 kilómetros (202 millas) al suroccidente de Bogotá, el 13 de marzo. El periodista sostuvo que desde el 27 de febrero ha recibido siete llamadas a su teléfono celular de parte de individuos no identificados que lo amenazaron de muerte. Todas las llamadas se hicieron desde puestos de venta de llamadas a celular, y por lo menos una de ellas vino desde un puesto muy cercano a las oficinas del diario, Hernández señaló al CPJ.
Hernández cree que las amenazas están vinculadas a una serie de cinco artículos sobre corrupción en un hospital local publicados entre diciembre del 2006 y febrero del 2007 en El Diario del Huila. Tras la publicación de los artículos, dos personas fueron arrestadas y se establecieron posibles vínculos entre la gerencia del hospital y funcionarios públicos en Neiva, señaló Hernández.
Mientras el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) y la policía nacional investigan las amenazas, Hernández decidió abandonar Neiva con su familia tras haber evaluado su situación con la gerencia del periódico. El periodista pidió al CPJ que mantuviera su paradero en secreto por temor a represalias.
El 16 de marzo, los medios locales informaron que Arizmendi, director informativo del programa “6 a.m. Hoy por Hoy” en Caracol Radio, había abandonado Colombia tras enterarse de una supuesta conspiración para asesinarlo. En un comunicado público, Caracol Radio señaló que el periodista había recibido “informaciones absolutamente confiables” sobre las intenciones de una agrupación subversiva no identificada de atentar contra su vida. Caracol Radio no reveló el paradero de Arizmendi pero señaló que seguiría trabajando en su programa noticioso desde el exterior. En Caracol Radio no han respondido varios mensajes efectuados desde el CPJ.
Más tarde, Arizmendi hizo público un comunicado indicando que sabía de dos atentados fallidos en su contra en los últimos seis meses, según informes de la prensa local.
El 18 de marzo, el presidente colombiano Àlvaro Uribe Vélez ofreció una recompensa de 100 millones de pesos (476,000 dólares estadounidenses) por información sobre el caso, según indicó la prensa internacional. De acuerdo al diario El Tiempo, el gobierno de Uribe calificó a la investigación sobre las amenazas contra Arizmendi de “alta importancia”.
Investigaciones del CPJ indican que por lo menos siete periodistas de las regiones colombianas fueron obligados a abandonar sus hogares tras recibir amenazas de muerte en el 2006. Si bien periodistas en Bogotá y otros grandes centros urbanos trabajan con mayor libertad que sus colegas en el interior del país, también enfrentan presiones e intimidaciones, según análisis del CPJ.