Nueva York, 5 de mayo, 2006—El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) está alarmado ante la condena por difamación penal del periodista venezolano Henry Crespo, quien fue sentenciado a 18 meses de prisión en suspenso tras informar sobre corrupción gubernamental. Crespo, redactor del semanario radicado en Caracas Las Verdades de Miguel, fue sentenciado el miércoles por el Tribunal 18 de Juicio del Área Metropolitana de Caracas.
El gobernador del estado de Guárico, Eduardo Manuitt, entabló la demanda contra Crespo en enero del 2005. Crespo señaló al CPJ que la acusación se basa en dos artículos publicados ese mes en los que denunció corrupción gubernamental y violaciones de derechos humanos en Guárico. Crespo indicó que apelaría la condena.
Miguel Salazar, editor y columnista de Las Verdades de Miguel, también fue acusado por difamación penal por Manuitt tras la publicación de una columna donde acusaba al gobernador de haber contratado a sicarios para asesinarlo. Según José López, director de Las Verdades de Miguel, Manuitt negó públicamente estar involucrado en un complot para asesinar a Salazar durante el juicio del periodista el mes pasado. El juicio de Salazar comenzó el 19 de abril y se espera un veredicto pronto, indicó al CPJ el editor.
“Condenamos la sentencia del periodista Henry Crespo”, señaló la Directora Ejecutiva del CPJ Ann Cooper. “Cuando un funcionario enjuicia penalmente a un periodista por criticar su conducta pública, está cometiendo un serio abuso de poder y enviando un mensaje inhibidor a todos los periodistas venezolanos”.
Las leyes que penalizan expresiones que no incitan a la violencia anárquica son incompatibles con el derecho a la libertad de expresión consagrado en el Artículo 13 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, que Venezuela ha ratificado.