Nueva York, 4 de junio del 2004—Seguidores del presidente venezolano Hugo Chávez Frías, molestos por la posibilidad de que el mandatario fuera sometido a un referendo revocatorio, atacaron ayer las instalaciones de dos medios de prensa.
Cerca de la 1 de la tarde, decenas de partidarios del gobierno lanzaron piedras y otros objetos contra la sede del canal Radio Caracas Televisión (RCTV). Los agresores se apoderaron de un camión, lo chocaron contra la entrada principal del canal y le prendieron fuego al vehículo, refirió al Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) el periodista de RCTV Luis Domingo Álvarez. Efectivos de la Guardia Nacional llegaron a los 20 minutos y los agresores se replegaron. La mayoría del personal de RCTV tuvo que ser evacuado.
Dos horas después, un grupo de unas 20 personas atacaron la sede del diario El Nacional en el centro de Caracas. Según Antonio Fernández, editor de política del diario, los atacantes lanzaron botellas y piedras contra el edificio y destrozaron varias ventanas. Además, quemaron un camión de distribución de El Nacional.
Los agresores también estrellaron un camión contra la reja del estacionamiento del edificio y ocasionaron daños a varios autos pertenecientes a los trabajadores del diario. Luego entraron a la sede administrativa del diario Así es la Noticia, propiedad de la casa editorial de El Nacional, y destrozaron computadoras, mobiliario y ventanas. Se dispersaron alrededor de las 5 de la tarde, cuando efectivos de la Guardia Nacional se presentaron para restablecer el orden.
Los ataques contra los medios de prensa ocurrieron cuando los venezolanos aguardaban un anuncio oficial por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE) sobre los resultados de un proceso de verificación de firmas, conocido como reparo, que pudiera activar un referendo para revocar el mandato del presidente Chávez.
En horas de la tarde de ayer, el CNE anunció que se habían recogido suficientes firmas para convocar un referendo revocatorio. El presidente Chávez, quien había acusado a la oposición de cometer fraude en la recolección de rúbricas, declaró que aceptaba la decisión y que comenzaría una campaña para derrotar el referendo.
Las relaciones entre el gobierno venezolano y los medios de prensa continúan tensas. El presidente Chávez a menudo arremete contra los medios privados, a los que acusa de promover la agenda política de los partidos opositores.
«El CPJ condena estos ataques y hace un llamado a las autoridades venezolanas a que sometan a los responsables a la justicia», declaró Ann Cooper, Directora Ejecutiva del CPJ.