Agencia de prensa estatal acusa a periodistas independientes de complicidad en conspiración global de narcotráfico

Nueva York, 22 de marzo de 2002 — La agencia estatal de noticias de Venezuela provocó indignación generalizada al acusar a tres periodistas independientes venezolanos de estar vinculados con una presunta conspiración global de narcotráfico controlada por bancos internacionales y líderes políticos de países desarrollados.

El 13 de marzo, la agencia estatal de información Venpres publicó un artículo de opinión en su página de Internet (www.venpres.gov.ve) con la firma de J. Valverde, el que parece ser un seudónimo. El artículo insinuaba que Ibéyise Pacheco, directora del diario caraqueño Así es la Noticia; Patricia Poleo, directora de El Nuevo País, también con sede en Caracas; y José Domingo Blanco, presentador de noticias del canal Globovisión, habían sido contratados por los carteles internacionales de la droga para ensuciar la reputación del gobierno venezolano.

A los tres periodistas se les conoce por sus duras críticas a Hugo Chávez Frías, el controvertido presidente venezolano.

«El CPJ condena este obvio intento del gobierno de difamar a tres periodistas independientes», declaró Ann Cooper, directora ejecutiva del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés).

El 17 de marzo, el presidente Chávez llamó el artículo un «error». Al día siguiente el director de Venpres, Oscar Navas Tortolero, ofreció su renuncia. Sin embargo, ese mismo día el ministro del Interior Ramón Rodríguez Chacín acusó a los periodistas locales de actuar «irresponsablemente» y desafió a toda la prensa independiente a hacerse exámenes toxicológicos.

El 21 de marzo, aduciendo hostigamiento e intimidación por parte del gobierno venezolano, Pacheco y Poleo solicitaron protección a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), con sede en Washington, D.C.

Pacheco y Poleo sostienen que sus nombres aparecen en una lista secreta de objetivos del gobierno y que recientemente han recibido varias amenazas de muerte. (Al parecer Blanco no ha recibido ninguna amenaza y no es uno de los peticionarios.) Actualmente la CIDH estudia el caso de las periodistas.
A petición de los abogados de los periodistas, la Fiscalía ha abierto una investigación acerca del incidente de Venpres. Un tribunal venezolano ha ordenado protección para Pacheco y para los empleados de Así es la Noticia, que fue atacado a fines de enero con un explosivo de fabricación casera.

En lo que parece haber sido un adelanto a la crítica internacional, el artículo de Valverde señaló, «No debería en consecuencia extrañarnos que algunos personajes e instituciones extranjeras, en alguna medida influidos o controlados por los carteles de la droga organicen en las próximas semanas algunas actividades y premios honoríficos para lavar la honorabilidad de nuestros narco-periodistas locales».

FIN