Ataques a la Prensa en 2001: CANADÁ

CANADÁ

Por lo general, la libertad de prensa se respeta en Canadá, y el CPJ no sigue la situación en ese país sistemáticamente. Sin embargo, el hostigamiento policial de periodistas que cubrían manifestaciones; las investigaciones acerca de ataques violentos contra periodistas; y las propuestas de ley contra el terrorismo, constituyeron motivos de preocupación el pasado año.

Siguiendo la tendencia apreciada en el 2000, la policía hostigó a los periodistas que cubrían manifestaciones. Varios comunicadores fueron detenidos durante la Cumbre de las Américas, celebrada del 20 al 22 de abril en la ciudad de Quebec, entre ellos Charles East, fotógrafo estadounidense de la agencia Sipa que cubría la cumbre para la revista Time y que fue arrestado el 20 de abril y detenido por tres días. Según se informó, la policía confundió al periodista, quien estaba acreditado y llevaba un casco que lo identificaba como miembro de la prensa, con un manifestante que había lanzado piedras a un agente. La fotógrafa Louise Bilodeau, de las agencias Stock y Clix y la revista L’actualité, fue arrestada por corto tiempo el 21 de abril, según indicó Reporteros sin Fronteras (RSF), organización pro libertad de prensa con sede en París.

La organización pro libertad de expresión Canadian Journalists for Free Expression (CJFE) informó que el 24 de junio agentes de la Policía Montada Real de Canadá (RCMP) incautaron metraje de video y demás material a Todd Lamirande, corresponsal de la red televisiva Aboriginal Peoples Television Network en Kamloops, Columbia Británica. Lamirande cubría una protesta contra la construcción de un centro turístico que culminó en enfrentamientos entre los manifestantes y los partidarios del proyecto en la zona. Tras haberse negado el periodista a entregar el material grabado, los agentes de la RCMP confiscaron el vehículo de Lamirande con todo lo que contenía, inclusive sus cintas de video. Los agentes retuvieron las cintas hasta que les sacaron copias, informó la CJFE.

Un perturbador incidente ocurrió en Columbia Británica el 25 de noviembre, cuando agentes de la RCMP al parecer se hicieron pasar por un equipo de filmación para capturar a un prófugo que había concedido entrevistas a los medios mientras huía. De acuerdo con varios despachos de prensa, al prófugo se le hizo creer que se iba a reunir con un equipo de filmación que quería hacer un documental sobre su vida.

Durante el año hubo varias novedades en la investigación del atentado perpetrado el 13 de septiembre de 2000 contra el periodista Michel Auger. Auger, veterano reportero judicial del diario en lengua francesa Le Journal de Montréal, había realizado investigaciones sobre la pandilla de motociclistas Hell’s Angels y la mafia local. El 30 de mayo, una pareja fue arrestada por la presunta entrega de información reservada sobre el periodista a la pandilla. Auger, quien se recuperó por completo del ataque, relató al CPJ que los dos sospechosos deben comparecer ante la justicia a principios del 2002. Mientras tanto, Michel Vezina, quien fue arrestado en noviembre del 2000 y acusado de facilitar la pistola utilizada en el atentado, fue sentenciado a casi cinco años de prisión el 28 de septiembre.

La alarma por la creciente intimidación por parte de las pandillas de motociclistas llevó al gobierno canadiense a aprobar una modificación de última hora a las leyes contra el pandillerismo, modificación que dispone severas sanciones por vigilar, amenazar u hostigar a periodistas o emplear la violencia contra ellos, dijo Auger.

Por otra parte, las organizaciones de periodistas expresaron preocupación por las propuestas de ley contra el terrorismo que fueron aprobadas tanto por la Cámara de los Comunes como por el Senado de Canadá. La CJFE ha criticado duramente un apartado que permite a los agentes del orden público celebrar audiencias investigativas con el fin de prevenir actos de terrorismo, señalando que los periodistas que se comuniquen con terroristas o sujetos sospechosos de terrorismo para conseguir información, pueden ser obligados a declarar sobre las conversaciones que hayan tenido con ellos.

Otro inquietante apartado propone que se permita al Centro de la Seguridad de las Telecomunicaciones (CSE), organismo perteneciente al ministerio de Defensa, vigilar las comunicaciones entre canadienses y extranjeros. La CJFE sostiene que la nueva ley es demasiado genérica y haría que los periodistas que utilizan fuentes en el extranjero no puedan garantizarles la reserva.

La violencia contra la prensa es relativamente rara en Canadá. Sin embargo, al igual que en los Estados Unidos, los periodistas inmigrantes enfrentan riesgos particulares. El asesinato en noviembre de 1998 de Tara Singh Hayer, editor del mayor y más antiguo semanario en lengua punjabi de Canadá, el Indo-Canadian Times, sigue sin resolverse. Hayer, quien tanto en Canadá como en India criticaba abiertamente la violencia de los fundamentalistas sij, había quedado parcialmente paralítico luego de un atentado anterior.

En octubre del 2000, la RCMP arrestó a dos hombres en relación con la explosión de una bomba en el vuelo 182 de Air India, en 1985, un atentado donde murieron 329 personas. Uno de los dos arrestados, Ajaib Singh Bagri, también fue acusado del intento de asesinato contra Hayer. El 10 de abril de este año, el Tribunal de Apelaciones de Columbia Británica confirmó una decisión anterior por la que se denegó a Bagri la libertad bajo fianza. El juicio probablemente comenzará en septiembre del 2002.

La CJFE y la organización de escritores PEN Canadá informaron que Tahir Aslam Gora, director y editor del semanario en lengua urdú Watan, había sido amenazado por varios miembros extremistas de la comunidad musulmana de Toronto desde principios del 2001, cuando Gora escribió un artículo acerca de los derechos de las mujeres musulmanas.