25 de mayo del 2000
Carlos Roberto Flores Facussé
Presidente de Honduras
Casa Presidencial
Boulevard Juan Pablo II
Tegucigalpa, Honduras
VIA FAX
Su Excelencia,
El Comité para Proteger a los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) se encuentra sumamente preocupado por la seguridad de Julio César Pineda, coordinador de prensa de Radio Progreso, en el poblado de El Progreso, cerca de la ciudad norteña de San Pedro Sula. Pineda quedó gravemente herido en un atentado hace tres semanas.
El CPJ tiene razones para creer que el ataque contra Pineda se debió a la cobertura de temas sindicales, migratorios y de salud pública por parte de Radio Progreso, y su propia labor en una comisión local de derechos humanos.
El 26 de abril, a eso de las 6:30 de la tarde, dos hombres desconocidos le dispararon a Pineda frente a su casa en San Pedro Sula, de acuerdo a las fuentes del CPJ en Honduras. El periodista, su esposa y sus dos hijos acababan de regresar en su motocicleta cuando dos hombres salieron de una camioneta sin placas. Uno de ellos sujetó a Pineda y le disparó en la frente. Los atacantes entonces huyeron sin llevarse nada, por lo cual es poco probable que se trató de un intento de robo. Pineda, quien llevaba casco, sobrevivió a los disparos pero quedó paralítico y sangrante. Estuvo hospitalizado por 26 horas y recibió tratamiento médico durante nueve días.
En los meses previos al ataque, Radio Progreso había reportado sobre casos de negligencia médica en el hospital de El Progreso; había denunciado a la Asociación Médica de Honduras por negarse a trabajar con un equipo médico cubano después del huracán Mitch; y se había opuesto a un aumento en las tarifas de bus en El Progreso. Según Pineda, estos reportajes enfurecieron a los médicos y dueños de buses locales.
Como coordinador de prensa de Radio Progreso, Pineda representaba a la radioemisora en una comisión que investigaba el ajusticiamiento de pandilleros y ex pandilleros en El Progreso. En su informe, divulgado en un foro reciente en El Progreso, la comisión insinuó que la policía estaba involucrada en estos hechos. En el foro, el comandante de la policía local, César Augusto Somoza, le dijo a Pineda: “Cuidado con lo que dices”, según relata Pineda y Omar Serrano, director de Radio Progreso.
Pineda había recibido varias llamadas amenazantes antes del atentado y el 18 de abril, un vehículo le siguió en la vía de El Progreso a San Pedro Sula. Tras el atentado del 26 de abril, la policía tardó tres días en iniciar una investigación y 14 días en producir un retrato hablado de los atacantes. Pineda, quien se encuentra actualmente en su domicilio recuperándose de sus heridas, todavía recibe llamadas de personas que cuelgan tan pronto él contesta, y su esposa afirma que le han seguido sujetos no identificados.
El CPJ teme que la vida de Julio César Pineda corre inminente peligro. Hacemos un llamado a su gobierno para que garantice la seguridad de Pineda y su familia, emprenda una investigación a fondo de este ataque, y asegure que los autores sean castigados con todo el peso de la ley.
Atentamente,
Ann K. Cooper
Directora Ejecutiva