Alarma al CPJ deterioro del estado de salud de periodista cubano

Nueva York, 11 de agosto del 2003—El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) se encuentra alarmado por el deterioro del estado de salud del periodista encarcelado Oscar Espinosa Chepe, quien la semana pasada fue trasladado a un hospital militar de la capital, La Habana.

El jueves 7 de agosto, Espinosa Chepe se sintió muy mal y fue llevado de un hospital de la provincia oriental de Santiago de Cuba al Hospital Militar Finlay en La Habana, según su esposa, la periodista independiente Miriam Leiva. Ayer, 10 de agosto, Leiva lo visitó por espacio de una hora en el hospital. Durante la visita, un oficial de la Seguridad del Estado le manifestó que cuando lo estimaran conveniente, su esposo sería enviado de regreso a la prisión.

El periodista, de 62 años de edad, padece varias enfermedades avanzadas, entre ellas cirrosis, hepatitis, insuficiencia hepática e hipertensión arterial. Leiva declaró que Espinosa Chepe también presenta sangre en las heces fecales y tiene anemia y parásitos.

Espinosa Chepe fue sentenciado a 20 años de prisión el 7 de abril, por cometer actos contra «la independencia o la integridad territorial del Estado» (Artículo 91 del Código Penal) y por violar la Ley 88 de Protección de la Independencia Nacional y la Economía de Cuba.

En abril, las autoridades trasladaron a Espinosa Chepe de La Habana a una prisión en Guantánamo, en el otro extremo de la isla. A causa de sus afecciones hepáticas —que según Leiva habían estado controladas antes de la detención y encierro del periodista— y otros padecimientos que se han agravado en la cárcel, el periodista ha ingresado reiteradas veces en hospitales en los últimos cuatro meses. En julio, lo enviaron a la prisión de Boniato, donde, pese a su delicado estado de salud, estuvo ocho días en celda de aislamiento.

Las autoridades penitenciarias permiten que Leiva visite a su esposo sólo cada tres meses. Ella ha viajado cientos de kilómetros para verlo con más frecuencia, pero los funcionarios de la prisión se lo han impedido. Leiva teme que su esposo pueda morir a consecuencia del encarcelamiento y ha reclamado a las autoridades cubanas que le permitan cumplir la sentencia en el domicilio.

Espinosa Chepe es uno de los 28 periodistas independientes cubanos que fueron arrestados como parte de una campaña gubernamental contra la oposición y la prensa independiente en el mes de marzo. Los periodistas permanecieron encarcelados en celdas del Departamento de Seguridad del Estado (DSE) hasta el 24 de abril, cuando la mayoría de ellos fueron trasladados a cárceles ubicadas a cientos de kilómetros de sus hogares.

«El horrible trato que ha recibido Oscar Espinosa Chepe en la prisión no hace más que acentuar la injusticia que se cometió al encarcelarlo», declaró Joel Simon, subdirector del CPJ. «El periodista debe ser liberado de inmediato por razones humanitarias».