Venezuela obliga a los proveedores de servicio de Internet a vigilar la web

Por John Otis, corresponsal del CPJ para la región andina

El concepto de neutralidad de las redes plantea que todo el tráfico de Internet debe recibir el mismo tratamiento y que los proveedores de servicio de Internet deben funcionar como vías de libre paso de la información y no como filtros. Pero en Venezuela, una nación políticamente polarizada, la neutralidad es una cualidad cada vez más rara y ahora los proveedores de servicio de Internet están sintiendo la presión.

El gobierno socialista del presidente Nicolás Maduro está obligando a los proveedores de Internet a actuar como policías de la Internet. Mediante controles de cambio monetario, el gobierno de Maduro también restringe el acceso de dichos proveedores a los dólares, los cuales permiten a los proveedores mejorar los servicios y mantenerse actualizados con respecto a los cambios tecnológicos. A los proveedores de Internet ni siquiera se les permite aumentar sus tarifas mensuales para mantener el paso de la inflación galopante.

“Venezuela no es Disneylandia”, expresó con frustración al CPJ un ejecutivo de una empresa proveedora de Internet.

Los proveedores de Internet han sido objeto de mayor escrutinio a medida que la economía venezolana cae en picada. En un contexto de inflación en rápido ascenso, escasez de productos y otros problemas económicos, en la actualidad el dólar estadounidense se compra en el mercado negro a una tasa 10 veces superior a la tasa oficial de 6.3 bolívares por dólar. Muchas personas siguen de cerca este mercado paralelo mediante sitios web tales como www.dolartoday.com, con sede en Miami.

Por su parte, el presidente Maduro sostiene que la especulación monetaria es parte de una “guerra económica” que se libra contra su gobierno. El mes pasado, el ente regulador de las telecomunicaciones, CONATEL, comenzó a ordenarles a los proveedores de Internet bloquear sitios web que proporcionen la tasa de cambio del mercado negro. Hasta el momento, los proveedores de Internet han restringido el acceso a más de 100 URL.

La orden se sustenta en la ley de medios de Venezuela del 2004, la cual tipifica como delito la difusión de información que pueda generar zozobra en la sociedad. Los proveedores deben cumplir la orden en un plazo de 24 horas o estarán sujetos a ser sancionados, incluyendo la pérdida de la concesión.

“Por supuesto que no nos gusta”, señaló el ejecutivo de la empresa proveedora de Internet. “Pero para mí desafiar esto significaría perder la empresa”.

El gobierno argumenta que publicar la tasa de cambio del mercado negro incentiva a los comerciantes a subir los precios, lo cual socava las tentativas del gobierno para frenar la inflación. La tasa inflacionaria de Venezuela, 54 % al año, es una de los más elevadas del mundo. Ese argumento tiene alarmados a los analistas de medios.

Ante un trasfondo de presiones gubernamentales, autocensura y la venta de medios venezolanos tradicionales –como Globovisión y Cadena Capriles— a propietarios vinculados con el gobierno, muchos periódicos, canales de TV y radioemisoras ya no ofrecen cobertura informativa a fondo de los actos de las entidades estatales y los funcionarios gubernamentales.  Los medios sociales, los blogs y otros sitios de Internet son los lugares de referencia para consultar noticias críticas del gobierno, de acuerdo con Carlos Correa, director ejecutivo de Espacio Público, una ONG de Caracas que se dedica a cuestiones de libertad de expresión.

Correa y otros temen que restringir el acceso a los sitios web de tasas de cambio, sea el primer paso hacia un bloqueo más amplio dirigido contra la información que deje mal parado al gobierno de Maduro.

“Ahora mismo es dolartoday.com pero mañana podría ser un sitio web que denuncie la corrupción gubernamental”, declaró al CPJ William Peña, director del boletín Inside Telecom, con sede en Caracas. “Es un asunto muy grave. Se viola el principio de la libertad de Internet y el legado de la neutralidad”.

Bajo la presión de CONATEL, la versión venezolana del sitio www.tucarro.com, que permite la compraventa de automóviles de uso, borró los precios de autos que habían sido cotizados en bolívares indexados a la tasa de cambio del mercado negro.

Pedro Maldonado, director general de CONATEL, defendió con firmeza la medida del gobierno. “Quienes operan estas páginas web son actores políticos, gente con intencionalidad política vinculadas a la oposición del gobierno venezolano y que tratan a través de este mecanismo generar distorsiones graves en la economía”, Maldonado  declaró a los periodistas el mes pasado.

Y no obstante el bloqueo está lleno de agujeros. Dolartoday.com y otros sitios cambian con frecuencia las direcciones de sus páginas web agregando un punto o un guión y luego informando al público por Twitter. Como respuesta, el 19 de noviembre Maldonado envió una carta a Twitter donde solicitaba a la empresa de San Francisco, California, que bloqueara esa información, pero Twitter ignoró la solicitud.

Otro objetivo ha sido Bitly, el popular sitio que permite acortar las direcciones URL para facilitar su envío como enlaces mediante los medios sociales. CANTV, un proveedor de Internet estatal que domina el mercado de usuarios de Internet residenciales, ha bloqueado el sitio, aunque éste continúa disponible en otros proveedores de Internet venezolanos.

Otro ejecutivo de una empresa proveedora de Internet de Caracas expresó que la estrategia de CONATEL es desgastar a los usuarios de Internet para que con el tiempo desistan de buscar información que el gobierno considere subversiva.

Además de funcionar como censores a tiempo parcial, las autoridades presionan a los proveedores de Internet venezolanos de otras maneras. Por ejemplo, el acceso a dólares a la tasa de cambio oficial está estrictamente controlado por el gobierno. Las cuotas de dólares asignadas a los proveedores de Internet continúan disminuyendo, lo cual dificulta aún más la importación de materiales y tecnología para mejorar los servicios. Con frecuencia, tales restricciones obligan a los importadores a comprar dólares mucho más caros en el mercado negro para poder realizar compras en el exterior.

De acuerdo con cifras de la Cámara de Empresas de Servicios de Telecomunicaciones de Venezuela, sus empresas afiliadas recibieron apenas 28 millones de dólares a la tasa de cambio oficial este año, en comparación con los 377 millones de dólares recibidos en 2012.

En el mismo período, la cuota de dólares oficial que el gobierno fijó para las empresas afiliadas a CANAEMTE, una asociación que agrupa a las empresas venezolanas que construyen infraestructura de telecomunicaciones, cayó de 46 a 6 millones de dólares.

Mientras tanto, el gobierno solamente ha permitido que los proveedores de Internet impongan minúsculos incrementos a sus tarifas mensuales, a pesar de la creciente inflación, lo cual trae como resultado que Venezuela tenga una de las velocidades de descarga de Internet máslentas del mundo. Dada la creciente paranoia del gobierno con respecto a la información disponible en la Internet, puede que esa situación no cambie en el futuro cercano.

El ejecutivo de la empresa proveedora de Internet de Caracas afirmó que su empresa ha decidido que es mejor acatar las reglas de juego del gobierno para poder seguir ofreciendo servicio de Internet, al tiempo que añadió: “En realidad nos han puesto la soga alrededor del cuello”.