El CPJ alarmado ante comentarios del presidente Uribe

Nueva York, 30 de junio del 2005—El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) está alarmado ante recientes comentarios del Presidente colombiano Álvaro Uribe Vélez que pueden poner en peligro a los periodistas que trabajan en Colombia.

En una entrevista concedida el 27 de junio a la emisora W Radio, Uribe declaró que guerrillas izquierdistas le habían informado por adelantado a un medio de prensa extranjero sobre un inminente ataque en el sureño departamento del Putumayo. “Tengo una tristeza porque estos terroristas siguen convocando periodistas a que les cubran las acciones […] A uno le da tristeza estar en un avión con 22 ataúdes de 22 compatriotas y saber que una de las cámaras de televisión llegó… tres días antes al Putumayo”, sostuvo Uribe, sin identificar el medio de comunicación.

Más tarde, en declaraciones ofrecidas a la cadena Caracol Radio, Uribe repitió las imputaciones. Cuando el periodista de Caracol Radio Darío Arismendi le preguntó si se refería al periodista colombiano Hollman Morris, quien está trabajando en un documental para la BBC, Uribe respondió: “Allá había una cámara, Darío, allá había una cámara y a uno le preocupa eso. El [comandante de la Policía en el Putumayo] General Castro me dijo: ‘No, yo hablé con ellos. Llevaban tres días aquí'”.

Los comentarios de Uribe fueron pronunciados después de que las guerrillas izquierdistas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) lanzaran violentos ataques contra bases del ejército en el departamento del Putumayo.

Morris, quien en mayo recibió amenazas de muerte por su trabajo, viajó en junio a los Estados Unidos para recoger el premio Hellman-Hammett 2005, otorgado por Human Rights Watch, y hacía poco había regresado a Colombia. Consultado por el CPJ, Morris declaró que él y el productor de la BBC Guillermo Galdós habían llegado al Putumayo el 26 de junio, el mismo día que Uribe arribó a la zona. Morris precisó que le había dicho al general Castro, el comandante de la Policía, que llevaba tres o cuatro días en Colombia.

Al parecer funcionarios del gobierno malinterpretaron la respuesta de Morris. Horas más tarde, el mismo 27 de junio, la Presidencia emitió un comunicado que reconocía que “La alusión que el Presidente de la República hiciera en la mañana de hoy sobre la presencia de periodistas internacionales en el departamento del Putumayo, fue hecha sobre información equivocada acerca de la fecha en que los reporteros llegaron a la zona”.

Morris afirmó que las declaraciones de Uribe lo pusieron en peligro y que tuvo que parar las entrevistas en Putumayo y regresar por temor a represalias. Añadió que la nota de prensa de la oficina de Uribe le preocupaba porque se limitaba a decir que hubo una equivocación sobre las fechas, sin abordar el fondo de las imputaciones.

“El gobierno del presidente Uribe debería hacer todo lo posible por garantizar la integridad física de periodistas como Hollman Morris, en lugar de poner en peligro su seguridad al emitir comentarios irresponsables como éstos”, declaró Ann Cooper, Directora ejecutiva del CPJ.

Muchos periodistas colombianos han sido amenazados, atacados y asesinados por causa de sus supuestos vínculos con las fuerzas de seguridad, grupos paramilitares o guerrillas de izquierda. Informar sobre temas como el narcotráfico, las actividades de los grupos armados y la corrupción local ha colocado a los periodistas en una situación de gran riesgo. Morris, quien es reconocido por sus reportajes investigativos sobre el conflicto civil colombiano, recibió en mayo una corona fúnebre junto con una nota que expresaba “sinceras condolencias”.

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